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El brandy es sin duda alguna, uno de los licores añejos más finos y exquisitos que existen. A continuación detallamos las curiosidades más interesantes sobre el brandy para que te conviertas en todo un experto de esta majestuosa y genuina bebida.
En el siglo XVI un químico holandés, ante la necesidad de reducir los costes de almacenaje y transporte de una excesiva cosecha de vino, tuvo la idea de reducir su volumen destilándolo. Al resultado lo llamó ‘brandewinj’. Un término imposible de pronunciar para los ingleses, quienes decidieron rebautizarlo como brandy.
Son muchos los factores que construyen las singulares características organolépticas del brandy de Jerez. La utilización de uvas Airén y Palomino, el sistema de elaboración de Criaderas y Solera, el particular clima de la zona de Jerez y el envejecimiento en botas de roble americano, que previamente contuvieron los mejores vinos de Jerez. Único e inigualable.
El sistema de criaderas y solera es un sistema de añejamiento originario de Jerez en el siglo XIX que consiste en mezclar destilados jóvenes con otros más viejos. En el Marco de Jerez se puede encontrar diferentes sistemas de criaderas y solera, en función del número de escalas o niveles de apilación de barricas. De esta forma, por ejemplo, una solera con tres pisos de botas apiladas, tiene tres escalas. Las filas más altas son ocupadas por las criaderas, que son las botas que guardan el brandy más joven, mientras que la solera conserva el brandy más añejo, ocupando las filas más cercanas al suelo.
Los brandis listos para su embotellado se extraerán siempre de la solera. La saca o cantidad extraída para ser embotellada se reemplazará con la misma cantidad de vino procedente de las botas de la primera criadera, la escala inmediatamente superior a la solera.
A esta reposición se le llama rocío. A su vez, el vino extraído de la primera criadera, se rociará con vino de la segunda criadera, lo que nos llevará a subir peldaño a peldaño hasta la escala superior, o sobre tabla, que será completada con vino nuevo.
Es importante destacar que la extracción o saca es siempre parcial, y nunca superior a un tercio del contenido de cada bota. Por tanto, como nunca llegan a vaciarse las botas del todo, el producto de las soleras será siempre una mezcla resultante de los brandis de todas y cada una de las vendimias, lo cual conlleva por un lado que los brandis elaborados mediante este sistema nunca se etiqueten con indicación de añada, y por el otro, que la calidad del producto se mantenga año tras a año.
Las cuatro diferencias principales entre el Brandy y el Cognac son la ubicación, la materia prima, la destilación y la crianza.
El Brandy de Jerez solamente se puede producir en la zona del marco de Jerez (municipios de El Puerto de Santa María, Jerez de la Frontera y Sanlúcar de Barrameda), mientras que por otro lado el Cognac solo se puede elaborar en Francia, en la región de Cognac
El Brandy se elabora a partir de la uva Airén o Palomino, mientras el Cognac tan solo se puede elaborar con tres variedades de uva blanca ugni blanc, también algo de colombard o folle blanche.
Por otra parte, el Brandy de Jerez se puede elaborar mediante el proceso de destilación en alambiques, alquitaras o ambos. Sin embargo, en la destilación del Cognac, se hace con doble destilación en un alambique tipo Charentais, un alambique clásico de cobre.
Por último, el brandy envejece en botas de roble americano, previamente envinadas con vinos de Jerez con alto contenido en taninos, grano apretado y resistente a las fugas, y que produce aromas cremosos; mientras que el cognac lo hace en barricas de roble francés nuevas, tipo “Limousin” o “Tronçais” una madera de grano medio, dura y fibrosa que emana aromas especiados.
El brandy y el whisky son las dos bebidas nobles más reconocidas del mundo. Ambos destilados son completamente diferentes entre ellos aunque en muchas ocasiones comparten ciertos parámetros, como es el uso de los Sherry Cask, convirtiendo a estas emblemáticas barricas en una fuente inagotable de calidad y finura de referencia en el mundo de los destilados.
El brandy se produce destilando vino de uva, mientras que el whisky es destilado de cereales como la cebada malteada, el centeno y el maíz. Por otra parte el brandy de Jerez envejece en barricas de roble americano que previamente han envejecido Vinos de Jerez. Para su envejecimiento se utiliza el sistema de criaderas y soleras. Por su parte el whisky se lleva a cabo en barricas de roble procedente de EEUU, Hungría, Francia, etc. que hayan contenido anteriormente Bourbon, Vinos de Jerez o Vinos de Oporto.
Aunque el whisky se puede producir internacionalmente, un brandy de Jerez solo se puede producir en el marco de Jerez, compuesto por Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda y El Puerto de Santa María.
Los grandes amantes del Whisky, una vez descubren el Brandy de Jerez, también se vuelven devotos de este tipo de destilado.
El ron es una bebida alcohólica que se elabora a partir de la fermentación del jugo de caña de azúcar y sus derivados, como la melaza. Pasa por procesos de fermentación y destilación.
El ron no tiene métodos de producción definidos sino que se basa únicamente en estilos tradicionales que pueden variar entre ubicaciones y destiladores.
Se produce principalmente en el Caribe y América Latina.
Las paredes de piedra de las bodegas tradicionales están cubiertas por una capa negra de hongo que aprovecha el vapor de la destilación para sobrevivir. Además, proliferan también en las partes subterráneas, al igual que las arañas. Estos seres son los mejores aliados de los bodegueros, ya que se alimentan de las termitas, principales depredadoras de la madera de las barricas.
El brandy se añeja en botas de roble. Cuanto más tiempo pase en las botas, mayor complejidad y matices aportará al brandy. Cuando el brandy se almacena en estas botas, adquiere una tonalidad más oscura. Diferentes fabricantes de brandy añaden color para darle un toque dulce a la bebida pero también un color caramelo. Por esta razón, un brandy oscuro no siempre es sinónimo de un brandy con décadas de crianza.
Cada año se utilizan más de 50 millones de kilogramos de uvas para obtener Brandy de Jerez, lo que se traduce en una necesidad de más de 10.000 hectáreas de viñedo. Con tales dimensiones, no es de extrañar que a España se le conozca como “El gran viñedo del mundo”.
El brandy se obtiene tras la destilación del vino, que tras un largo proceso de maduración, resulta ser una bebida mucho más noble y refinada. Se requieren unos 3 litros de vino y unos 4 kilogramos de uva para producir tan solo una botella de nuestro brandy Carlos I.
